Minimó, el prototipo eléctrico de Seat con el que quiere conquistar las ciudades

Electrificación, conectividad y conducción autónoma. Estas son, según los propios fabricantes, las tres grandes tendencias que guían actualmente la industria del automóvil. En las dos primeras se ha avanzado bastante y representan el futuro a corto plazo de los automóviles. Pero en el caso de la tercera tendencia -la conducción autónoma- el horizonte es más lejano, entre otras cosas porque depende en gran medida del desarrollo previo de la conectividad.

La contaminación atmosférica y el cambio climático están empujando a la industria automovilística a una reconversión radical, para tratar de limitar al máximo la emisión de gases contaminantes. Un problema que se agudiza en las ciudades, donde la concentración de cientos de miles de automóviles han convertido a la atmósfera en un grave riesgo para la salud humana que además tiene efectos catastróficos para el planeta. El motor de combustión tienen los años contados, y su sustituto está claro: las batería eléctrica.

Al mismo tiempo, a las puertas de la eclosión de la tecnología 5G, los fabricantes de automóviles intentan no quedarse atrás en esa carrera que conducirá a un mundo hiperconectado, donde aspectos como la conducción se verán enormemente favorecidos.

Un ejemplo de ello es el que ha propuesto Seat en el marco del Mobile World Congress (MWC) de Barcelona. La compañía automovilística ha presentado Minimó, un vehículo eléctrico de dos plazas concebido para entornos urbanos. De momento, se trata de un ‘concept car’, hiperconectado mediante multiples sensores gracias a la tecnología 5G y con una autonomía de más de 100 kilómetros. El objetivo es que esté en el mercado en 2021.

«Lo mejor del mundo del coche y de la moto»

«Puede transportar a dos personas, una delante y otra detrás, en posición de motocicleta», explican fuentes de Seat. «Este vehículo combina lo mejor de dos mundos. Lo mejor del mundo del automóvil, porque vas cubierto, y lo mejor del mundo de la moto, porque es fácil de aparcar», prosiguen.

El vehículo está concebido tanto para uso privado como para ser compartido (carsharing). Según cálculos de la propia compañía, está especialmente diseñado para hacer ganar hasta un 50% de rentabilidad a las plataformas de coche compartido, puesto que no es necesario trasladar los coches a los puntos de recarga y puede estar continuamente en servicio, gracias un sistema de battery swap, que permite la recarga completa del vehículo en pocos minutos.

«Minimó ha sido especialmente ingenierizado para adaptarse a las plataformas de movilidad que marcarán el futuro de la circulación en las ciudades, donde el tráfico se va a restringir. Es la solución que estaban esperando las empresas de carsharing«, ha subrayado el presidente de Seat, Luca de Meo durante la presentación en Barcelona.

El prototipo mide 2,5 metros de longitud y 1,24 metros de ancho. Además, ocupa tan solo 3,1 metros cuadrados, frente a los 7,2 metros de un coche convencional, por lo que se puede aparcar en los aparcamientos para motos.

Conductores desde 16 años

Entre otras funciones, el coche reconoce si el conductor tiene 16 o 18 años para adaptar su velocidad máxima de 45 a 90 kilómetros por hora y, mediante el Asistente de Google en Android Auto, el conductor puede interactuar con el vehículo a través de la voz.

El prototipo presentado en el MWC supone un paso más en la estrategia de la marca automovilística en el negocio de la movilidad urbana, tras el lanzamiento hace unos meses del eXS KickScooter, una especie de patinete eléctrico de dos ruedas.

En declaraciones a los periodistas, el presidente de Seat ha señalado que la compañía quiere conocer ahora «la reacción» del mercado a su propuesta, al tiempo que acaba de estudiar los costes para reducirlos al máximo e iniciar luego el trabajo de ingeniería.

De Meo ha insistido en la voluntad de Seat de liderar la micromovilidad, que ha definido como «aquellos movimientos por debajo de los 10 kilómetros, que representan hoy alrededor del 60% del total».