La verdadera negociación del Gobierno con el ELN empezará en año y medio, aseguró el exministro Juan Camilo Restrepo

La verdadera negociación con el ELN apenas comenzará en año y medio o dos años. La afirmación la hizo el exministro de Hacienda Juan Camilo Restrepo al referirse al avance de las negociaciones de paz entre el Gobierno nacional y el grupo guerrillero.

Esto, ante las rectificaciones que hicieron jefes del ELN al presidente Gustavo Petro tras recientes ciclos de diálogos en La Habana (Cuba) y México, entre los que se acordó el cese al fuego bilateral a partir del 3 de agosto del 2023 y por 180 días (hasta febrero del 2024).

“En una segunda rectificación que recibió el presidente Petro de parte de Antonio García (la primera fue cuando imprudentemente anunció el 31 de diciembre de 2022 que se había llegado a un acuerdo sobre el cese al fuego), le hizo notar que se había equivocado al mencionar mayo de 2025 como la aurora boreal de la paz en Colombia”, afirmó Restrepo en una columna para El Nuevo Siglo titulada “La ambigüedad de lo vinculante”.

Prosiguió al precisar que esta fecha, de acuerdo con García, no es más que el término previsto para concluir los procesos de participación de la sociedad civil según lo acordado en la agenda divulgada en México el 10 de marzo de 2023, pero no la conclusión de las negociaciones con el ELN propiamente dichas, como jubilosamente anunció el presidente Petro.

“Esta segunda rectificación que recibe el presidente de Colombia del jerarca del ELN, además de mostrar la enorme improvisación como viene manejándose todo lo concerniente a la paz, plantea varios interrogantes de fondo”, anotó el exministro.

Señaló que si mayo del 2025 es apenas la fecha límite para dar por concluidas las consultas con la sociedad civil consignados en los puntos uno, dos y tres de la frondosa agenda acordada en México y esta fecha es anterior, según Antonio García, a la iniciación de las discusión sobre el punto cinco de la agenda titulado “Fin del conflicto armado”, ello significa que prácticamente lo que queda del gobierno de Petro se irá en unas agitadas movilizaciones sociales; y que no se alcanzará en este cuatrienio a “superar el conflicto armado y erradicar la violencia de la política”, objetivo último como reza textualmente el punto cinco de la agenda acordada en México.

“Quizás esto es lo que quiere el ELN, pero no el país, que aspiraría a tener unos acuerdos de paz firmados con este grupo con una antelación mayor”, manifestó.

Consulta a la sociedad civil

De igual forma, cuestionó en qué consiste el proceso de consulta a la sociedad civil que va a comenzar y que habrá de durar por lo menos dos años, según la rotunda rectificación de Antonio García al presidente de Colombia.

Sobre esto, afirmó que en los acuerdos firmados en La Habana se dice que se creará un “gran consejo de participación nacional”, cuya composición y funciones se desconoce. Pero, anotó, es de suponer que este gran consejo será el núcleo en torno al cual se despacharán las atiborradas directrices consultativas señaladas en los puntos uno, dos y tres consignadas en la agenda de México; que prácticamente consisten en un mandato para refundar a Colombia y cambiar de la a la z todas las instituciones.

Insistió que este es uno de los puntos más difíciles con que tropezaron las negociaciones adelantadas con el ELN en Ecuador en 2017 y 2018. Subrayó que ese grupo insistía, hasta el cansancio, que las opiniones de la sociedad civil debían tener carácter “vinculante”, es decir, que estaban por encima de cualquiera otra instancia y debían incorporarse a la legalidad colombiana de manera automática.

No obstante, escribió en la columna que cuando se lee de manera desprevenida la “abigarrada” agenda acordada en México no es difícil adivinar que el ELN mantiene su pretensión de que lo que se acuerde con la llamada sociedad civil tendrá carácter obligatorio o vinculante.

Por eso, precisó que algunos apartes de la agenda así lo sugieren. Por ejemplo, en el preámbulo se habla de que “las partes de este proceso identificamos la necesidad de un gran acuerdo nacional”; e igualmente se indica que el dialogo tiene como objetivo “pactar las transformaciones que requieran las regiones y el país en su conjunto”; y finalmente en el punto 6.4 se habla de que los acuerdos serán objeto “de validación democrática por medio de la participación de la sociedad en el proceso de paz, de principio a fin”.

Asamblea constituyente
Según él, lo que debe quedar muy en claro es que pretender darle el carácter de vinculante a las asambleas populares que se anuncian o a las conclusiones del gran consejo de la consulta ciudadana, configuraría en la práctica el montaje de una asamblea constituyente por la puerta de atrás.

Concluyó al decir que se entrará durante el próximo año y medio, no a negociar la paz, que queda suspendida según la rectificación hecha por Antonio García al presidente, sino en un periodo en el que además de organizar el cese al fuego con este grupo que todavía está biche, se concentrará en hablar con la llamada sociedad civil. “Vamos a entrar en ‘un estado dialogante’ y no de negociación”, aclaró.

Al respecto, recomendó que sería bueno que desde la mesa de negociación se informara si la condición de “vinculantes” se mantiene o no para las conclusiones que salgan del gran consejo de la participación, que ahora se anuncia con bombos y platillos.

Gobierno y ELN preparan los protocolos sobre acuerdos en los diálogos

Las delegaciones negociadoras del Gobierno y el ELN informaron el 23 de junio que dos comisiones preparan los protocolos referidos al cese al fuego bilateral acordado en junio y la participación de la sociedad en el proceso de paz.

Desde el 20 de junio sesiona en La Habana una comisión encargada de redactar los protocolos en lo referido al acuerdo de cese al fuego bilateral, nacional y temporal firmado el 9 de junio en Cuba, según comunicaron ambas partes.

El documento emitido en La Habana, de acuerdo con EFE, añadió que otra comisión prepara en Bogotá “la composición del Comité Nacional de la Participación, el organismo encargado de dinamizar el diseño de la participación de la sociedad en el proceso de paz”.

Estas comisiones finalizarán su trabajo el próximo 6 de julio, anunciaron las delegaciones.

Ambos asuntos se abordaron durante el tercer ciclo de las negociaciones de paz entre el Gobierno y el ELN que sesionó en Cuba.

FUENTE:INFOBAE.COM