El Ejército impide por la fuerza la entrada en Venezuela de la ayuda humanitaria prometida por Guaidó

Pese a que Nicolás Maduro había prometido que no atacaría el reparto de ayuda humanitaria, las fuerzas de seguridad venezolanas han frenado por la fuerza la entrada del material que el líder opositor y autoproclamado presidente, Juan Guaidó, había prometido hacer llegar a los venezolanos este sábado desde Colombia y Brasil, en una jornada que, por el momento, se ha saldado con al menos dos muertos en la linde brasileña y al menos 285 heridos en los enfrentamientos entre voluntarios opositores y el Ejército en la frontera colombiana.

Los choques más visibles, dada la presencia de la prensa internacional, han tenido lugar en la frontera entre Venezuela y Colombia, donde cientos de voluntarios se han congregado desde primera hora de la mañana en el lado colombiano de los tres puentes que conectan Cúcuta, la ciudad colombiana donde se había hecho acopio de 600 toneladas de alimentos, medicinas y artículos de higiene, con el territorio venezolano: el puente internacional Simón Bolívar, que comunica con San Antonio de Táchira; el puente internacional Francisco de Paula Santander, que enlaza con la localidad de Ureña, y el puente Tienditas, bloqueado con contenedores.

El objetivo era transportar el cargamento en camiones hasta el límite fronterizo y, una vez allí, formar una cadena humana para distribuirlo por Venezuela, aunque los convoyes han sido frenados tanto en el Simón Bolívar como el Francisco de Paula Santander, donde las fuerzas de seguridad han lanzado gases lacrimógenos contra los manifestantes, por lo que los servicios de emergencia colombianos han contabilizado 285 heridos. En el segundo de esos puentes, dos camiones cargados de ayuda humanitaria han ardido y los voluntarios han formado una cadena humana para salvar el material; la oposición ha culpado al Ejército de incendiar los vehículos.

Con todo, los enfrentamientos más sangrientos se han registrado en la frontera con Brasil, donde dos camiones que partían de la ciudad de Paracaima han tratado de pasar a territorio venezolano, lo que ha degenerado en enfrentamientos que se han saldado con al menos dos muertos, según fuentes hospitalarias citadas por Reuters. Sin embargo, la Asamblea Nacional venezolana, de mayoría opositora, ha denunciado hasta cuatro personas han sido muertas por disparos y otra veintena han resultado heridas, además de precisar que las víctimas serían indígenas del pueblo pemón.

El voluntarismo de Guaidó

El presidente venezolano, Nicolás Maduro, se niega a recibir la ayuda humanitaria, convertida en símbolo de su pugna por la legitimidad política frente a Guaidó y que considera una injerencia de Estados Unidos, por lo que no solo había cerrado las fronteras, sino que había reforzado los controles con el despliegue de la Guardia Nacional Bolivariana, una fuerza de élite. Este sábado, se ha dado un baño de multitudes en Caracas, donde miles de seguidores le han arropado en una manifestación: «Mi vida está consagrada totalmente a la defensa de la patria; en cualquier circunstancia, jamás me doblegaré, jamás me rendiré, siempre defenderé a nuestra patria con mi vida misma si es necesario defenderla», ha garantizado.

Al final, tal como pretendía Maduro, ninguno de los convoyes de la oposición ha conseguido entrar en territorio venezolano, a pesar del optimismo que exhibía Juan Guaidó al dar inicio al traslado de la ayuda humanitaria. El líder opositor ha aparecido en el centro de recogida de la ayuda humanitaria situado junto al puente Tienditas, en Cúcuta, donde llegó el viernes pese a que el Gobierno le ha prohibido salir del país, y se ha subido a uno de 14 camiones con 280 toneladas de material que trataban de llevar hasta Venezuela, al tiempo que prometía que el material entraría en territorio venezolano.

«La ayuda humanitaria va camino a Venezuela de manera pacífica y tranquila para salvar vidas en este momento», señalaba, acompañado del secretario general de la OEA, Luis Almagro, y los presidentes de Colombia, Iván Duque; Chile, Sebastián Piñera; y Paraguay, Mario Abdo. «Mientras cargamos ayuda, algunos solo cargan asesinatos y generan violencia», añadía.

Guaidó ha asegurado a través de su cuenta de Twitter que al menos un camión había logrado entrar por Brasil, aunque después se ha confirmado que los dos vehículos salidos de Paracaima están  varados justo en el límite fronterizo. Posteriormente, ha señalado que los convoyes que partían de Colombia habían alcanzado el territorio venezolano, aunque estaban bloqueados: «Anunciamos que los camiones de la ayuda humanitaria provenientes de Colombia ya están en territorio venezolano. El régimen usurpador está impidiendo su paso. No podrán con nuestra decisión irreversible de vivir en libertad», argumentaba.

JORNADA TENSA EN VENEZUELA POR LA ENTREGA DE AYUDA HUMANITARIA