El papa Francisco considera que «todo feminismo acaba siendo un machismo con falda»

El papa Francisco considera que «todo feminismo acaba siendo un machismo con falda». Así lo ha manifestado al elogiar la ponencia que ha pronunciado la profesora italiana de Derecho Canónico, Linda Ghisoni, durante la cumbre antipederastia que reúne en el Vaticano a 190 jerarcas eclesiásticos.

El Sumo Pontífice ha dicho que «invitar a hablar a una mujer no es entrar en la modalidad de un feminismo eclesiástico, porque a fin de cuentas todo feminismo termina siendo un machismo con faldas».

En este sentido, el papa ha señalado que dar más funciones a la mujer en la Iglesia no resolvería el problema de los abusos sexuales. «Sí, eso es bueno pero no resolvería el problema», ha afirmado, para añadir a continuación que el «estilo» femenino debe integrarse en el pensamiento de la institución.

Francisco ha comentado con esas palabras la intervención este viernes en la cumbre sobre pederastia de Linda Ghisoni, subsecretaria del Dicasterio para los Laicos, Familia y Vida, que ha sido la primera mujer en hablar en esta reunión de jerarcas de la Iglesia.

«Invitar a hablar a una mujer sobre las heridas de la Iglesia es invitar a la Iglesia a hablar sobre sí misma, sobre sus heridas», ha añadido, a la vez que ha dicho que lo que se debe hacer es adoptar el «estilo» de una «mujer, esposa y madre». «Sin este estilo hablaremos del pueblo de Dios como organización, fuerza sindical, pero no como la familia nacida de la madre Iglesia», ha continuado.

Un grupo de exreligiosas, activistas y víctimas aboga por una «visión femenina»

Precisamente hace unos días, en vísperas del inicio de la cumbre de obispos convocada por Francisco para abordar el problema de los abusos sexuales en la Iglesia, un grupo de exreligiosas, activistas y víctimas abogó por una «visión femenina» para buscar soluciones a esta lacra.

Estas activistas, integrantes de la asociación Voices of Faith (voces de fe), buscan que se reconozca la capacidad de las mujeres para ejercer cargos de responsabilidad dentro de la Iglesia católica, hasta ahora prácticamente reservados a los hombres.

«Esta crisis global por los abusos ha evidenciado que las autoridades eclesiásticas necesitan una perspectiva femenina», señalaron.

El papa, por su parte, reconoció recientemente que muchas monjas sufren y han sufrido abusos sexuales por parte de curas y obispos.