GOBIERNO DE PEREIRA MANTIENE PERMANENTE VIGILANCIA DEL AGUA EN LOS ACUEDUCTOS URBANOS Y RURALES

La Dimensión de ​Salud Ambiental con el Programa Agua y Saneamiento de la Secretaría de Salud Pública y Seguridad Social de Pereira realizó vigilancia y control a la calidad del agua del casco urbano de la ciudad, a través de la toma de muestras de agua en Villasantana, Kennedy, San Judas, Ciudad Victoria, Gobernación del Risaralda, Parque Banderas, Parque Consotá, Santa Teresita, Pedregales y Parque Industrial. 

Ana Yolima Sánchez Gutiérrez, secretaria de Salud Pública y Seguridad Social de Pereira explicó «en lo corrido del año se han realizado 18 muestreos de agua donde se ha recolectado 108 muestras de diferentes puntos del casco urbano de la ciudad, y en el área rural se han realizado muestreos a 10 sistemas de suministro. A todos se les realiza vigilancia y control de acuerdo con la programación de la recepción de las muestras que es remitida por parte del Laboratorio Departamental de Salud Pública mensualmente».

El objetivo principal de las acciones de la vigilancia y control de la calidad del agua, se orienta en preservar la salud de la población que es suscriptora tanto de la red de abastecimiento de agua potable por parte de la Empresa de Servicio Públicos de la ciudad como de los acueductos rurales, donde está establecida la meta de inspeccionar, vigilar y controlar a 58 sistemas de suministros de agua potable en la ciudad.​

RECOMENDACIONES

Desde la Secretaría de Salud se recomienda a todas las personas que cumplen un papel fundamental en el proceso de calidad de agua tanto de acueductos urbanos como rurales a:

  • Realizar el tratamiento del agua no tratada proveniente de fuentes no protegidas con métodos sencillos como el filtrado y desinfección.
  • Asegurar la implementación de un programa de control y vigilancia de la calidad del agua.
  • Garantizar en todo el sistema de agua la presencia de un cloro residual de 0,5 mg/L medido en los puntos finales (grifos) del sistema de distribución de agua.
  • Disponer de comparadores de cloro para la medición de la presencia de cloro en el agua (el cloro residual se puede medir con materiales sencillos, por ejemplo, un comparador colorimétrico y pastillas de dietilp- fenilendiamina [DPD]).
  • Añadir cloro al agua, si encuentra ausencia de cloro residual en algunos puntos de la red, incluyendo grifos, para conseguir una desinfección total y un contenido suficiente de cloro residual en los puntos de uso o de consumo.
  • Proteger y restaurar los ecosistemas acuáticos, incluyendo montañas, bosques, humedales, ríos, acuíferos y lagos.
  • Mejorar la calidad del agua mediante la reducción de la contaminación, eliminando los vertimientos sobre las fuentes de abastecimiento y minimizando la liberación de productos químicos y materiales peligrosos, reduciendo a la mitad la proporción de aguas residuales no tratadas y aumentando el reciclaje y la reutilización segura.