Otty Patiño advierte que la mesa de negociación con ELN está en una grave crisis

Otty Patiño, jefe negociador del Gobierno con el ELN, habló con la emisora W, en la charla se tocó el tema del llamado a una reunión extraordinaria a la que citaron a la guerrilla para abordar varios temas y entre ellos el secuestro por parte de este grupo guerrillero.

Según Patiño “son muchas las víctimas del ELN: el reclutamiento, la extorsión, el minado. Si este tema (el secuestro) se aborda seriamente, seguramente será más fácil avocar otros tipos de delitos que las víctimas están reclamando que se terminen”. A eso añadió que “mientras estén agarrados a estas prácticas, se elimina cualquier posibilidad de que se termine el conflicto”.

Si siguen secuestrando el proceso de paz no va más

El jefe negociador del Gobierno fue claro. Aseguró que, si el ELN sigue realizando esas prácticas que afectan a la población, “será cada vez más inviable” permitir que siga la mesa de negociación.

No obstante, señaló que “no generaremos un ultimátum, pero el proceso se acaba cuando la población así lo diga. Se acaba por la falta de credibilidad hacia el Ejército de Liberación Nacional, pero no por la vocación de paz del Gobierno”.

Además, mencionó que el objetivo principal de la reunión, previa al quinto ciclo de negociaciones en México, era hablar de la crisis que se generó tras el secuestro y posterior liberación del papá de Luis Díaz, jugador de la Selección Colombia.

Patiño también indicó que “se debe resolver una crisis que se abrió con el secuestro y liberación del papá de Luis Díaz. Ese hecho puso en el tapete una reflexión: la confesión de que sí lo habían secuestrado y el reconocimiento del error”. Además, aprovechó para cuestionar si hay secuestrados de jerarquía pues según Patiño vale la pena cuestionar “¿por qué fue un error: porque era el papá de Luis Díaz? ¿por qué otros secuestros no los consideran errores?”.

Seguido a ello el jefe negociador aclaró que con el inicio del nuevo ciclo de diálogos en México espera que “se cierre la discusión sobre la finalización del conflicto”. Sin embargo, dijo que eso “no quiere decir que vayamos a firmar la paz”.

Todas las negociaciones están en crisis

Para el presidente Gustavo Petro, la paz total que tiene en su cabeza implica que no haya homicidios ni secuestros. Eso significa erradicar los grupos armados ilegales y remediar las situaciones que propician la violencia. Por eso, desde su nombramiento, su prioridad fue la mesa. No obstante, ese sueño de país que se hizo Petro está completamente alejado de la realidad, pues negociaciones abiertas de manera simultánea con dos grupos no terminan de cuajar.

Lo anterior está provocando verdaderos dolores de cabeza para el Gobierno. Por ejemplo, el ELN tenía 11 meses en conversaciones y decidió secuestrar al papá de Luis Díaz, lo que por supuesto se ganó el repudio y llevó a que las personas se cuestionaran el verdadero interés de paz por parte de la guerrilla. Por otro lado, el Gobierno y el ELN, se encuentran en medio de un alto el fuego que comenzó en agosto y aunque el ELN intenta desviar la atención, queda en evidencia su violación del armisticio.

Sumada a la crisis que tiene con el ELN, viene la decisión del Estado Mayor Central (EMC) de suspender su participación en la mesa y amenazar con romper las negociaciones “de manera definitiva”. Cabe resaltar que el EMC tiene un alto el fuego con el Gobierno desde octubre y acusa a su contraparte de incumplir los protocolos y los acuerdos establecidos, pues para los guerrilleros, los militares deberían salir de algunas zonas, pero según su versión se ha incrementado su número en aquellos lugares que se habían comprometido a desocupar.

FUENTE:INFOBAE.COM